Agricultores de 11 estados de México realizaron bloqueos en carreteras federales como parte del Paro Nacional Agropecuario, exigiendo que cultivos básicos como maíz, frijol, trigo y sorgo queden fuera del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Asimismo, demandaron mejores precios de garantía, proponiendo que la tonelada de maíz se pague en 7,200 pesos, frente a los aproximadamente 5,000 que reciben actualmente.
Fecha:Friday 24 Oct de 2025
Gestor:INSTITUTO IDIAT
Desde horas de la mañana, organizaciones agrícolas coordinaron bloqueos en:
Chihuahua
Sonora
Sinaloa
Tamaulipas
Jalisco
Guanajuato
Michoacán
Estado de México
Puebla
Veracruz
Chiapas
Las manifestaciones se concentraron en tramos estratégicos de la red carretera nacional, generando afectaciones al transporte de mercancías y pasajeros.
Líderes del movimiento denunciaron que la política comercial actual pone en desventaja a los productores mexicanos, quienes deben competir con granos importados a bajo costo desde Estados Unidos, muchos de ellos subsidiados.
El maíz —símbolo cultural y base alimentaria de México— ha sido uno de los productos más impactados por la apertura comercial.
Los productores argumentan que:
El precio pagado por la industria no cubre los costos de producción
Los insumos —fertilizantes, pesticidas, diésel— se han encarecido más del 30 %
Las importaciones del T-MEC desplazan la producción nacional
“El productor mexicano no puede competir en condiciones de desigualdad”, afirmaron los líderes agrarios.
El sector exige una revisión del capítulo agrícola del T-MEC para:
Resguardar la producción nacional de granos básicos
Regular el ingreso de maíz y trigo extranjeros
Proteger el empleo rural, ya que millones de familias dependen del campo
Los productores también piden mecanismos de salvaguarda comercial, para evitar que una caída internacional de precios afecte la rentabilidad local.
Representantes agrícolas solicitaron una mesa de diálogo inmediata con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) y con la Secretaría de Economía, para plantear soluciones concretas:
Precios de garantía realistas
Compra pública de excedentes
Programas de apoyo a pequeños y medianos productores
Mejor infraestructura para almacenamiento y distribución
Hasta el cierre del día, autoridades federales se mostraron abiertas al diálogo, pero pidieron liberación de las vías para avanzar en las negociaciones.
De continuar el conflicto:
Se afectaría el suministro alimentario en varias regiones
Podrían incrementarse los precios al consumidor
El país perdería competitividad agroalimentaria
Se agravaría el abandono del campo y la migración rural
Los agricultores han advertido que, si no hay respuestas rápidas, las movilizaciones escalarán en los próximos días.
El Paro Nacional Agropecuario expone una realidad profunda:
Aunque México es potencia alimentaria, sus productores sienten que su trabajo no es valorado ni protegido.
El futuro de los granos básicos —y de quienes los cultivan— dependerá de la capacidad del Gobierno y del sector para construir acuerdos que garanticen precios justos, competitividad y soberanía alimentaria.