Argentina enfrenta una campaña agrícola 2025/26 marcada por lluvias intensas y heladas en la región núcleo. Se esperan acumulados de entre 20 y 90 mm en 48 horas, lo que favorece cultivos de invierno pero amenaza zonas bajas con anegamientos. Tras las tormentas, ingresará aire polar que podría provocar heladas en zonas pampeanas y cordilleranas. El trigo mantiene buena condición, pero el maíz temprano muestra implantación irregular y el girasol avanza con el 90% sembrado. Provincias como Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos enfrentan riesgos por exceso de humedad y granizo. El INTA advierte una posible transición hacia La Niña (71% de probabilidad), lo que reduciría lluvias clave para soja y maíz
Fecha:Friday 19 Sep de 2025
Gestor:INSTITUTO IDIAT
La campaña agrícola 2025/26 en Argentina inicia bajo un panorama climático complejo que genera tanto expectativas como preocupación. Dos informes recientes —uno del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y otro de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires— advierten sobre precipitaciones intensas en el centro y noreste del país, con especial foco en la región núcleo, donde se concentra gran parte de la producción de trigo, maíz y girasol.
Las proyecciones indican acumulados de entre 20 y 90 milímetros en apenas 48 horas, lo que representa un alivio hídrico para los cultivos de invierno, pero también un riesgo de anegamientos en áreas bajas. El INTA destaca que zonas como Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos ya presentan niveles de agua útil en el suelo cercanos al 100%, lo que podría agravar la situación con nuevas lluvias.
Ambos informes coinciden en que, tras el paso de las tormentas, se espera el ingreso de una masa de aire polar que provocará un fuerte descenso de temperaturas. Esto podría derivar en heladas localizadas en la región pampeana y heladas generales en zonas serranas y cordilleranas. El trigo en pleno macollaje y el maíz recién emergido son especialmente vulnerables a estas oscilaciones térmicas.
Trigo: mantiene una buena condición general, pero los anegamientos en Buenos Aires y Santa Fe podrían afectar seriamente los lotes si las lluvias se intensifican.
Girasol: presenta un panorama más favorable, con el 90% del área sembrada y buen estado sanitario.
Maíz temprano: muestra una implantación irregular; en zonas con exceso de agua, como Santa Fe y Entre Ríos, la siembra podría retrasarse.
Buenos Aires: el centro y norte provincial enfrentan dificultades para la siembra y circulación de maquinaria.
Santa Fe: riesgos de anegamientos y heladas que comprometen trigo y maíz.
Córdoba: humedad plena en el este y noroeste, pero cualquier exceso podría revertir la ventaja.
Entre Ríos: se esperan tormentas intensas con posibilidad de granizo y ráfagas de viento.
El INTA advierte que el contexto internacional también influye. Aunque el fenómeno ENSO se mantiene en fase neutral, hay un 71% de probabilidad de transición hacia La Niña entre octubre y diciembre, lo que podría reducir las lluvias en el trimestre clave para la siembra de soja y maíz